Recuerdo su mano grande y gruesa sobre mi cara. Lograba acariciar toda mi cara. Me encantaba su mano. Siempre olía a una mezcla de tabaco y Pierre Cardin.

El cielo tronaba como solo en Nogales, Sonora pasa. El coro seguía entonando la última canción de la Misa en el Santuario de Guadalupe. Era una canción triste y me daba miedo. Vino y Pan, en Oblación…

Había ido con mi abuelo Memo a misa ese día. Era una tarde. Yo tendría unos 4 años.

La música subía de volúmen y la tormenta eléctrica en aquella ciudad tambien.

Mi abuelito me abrazaba. Pegaba mi cabeza a su panza.

El coro con voces finas parecía que lloraba. Yo estaba a punto de hacerlo. A mi alrededor estaban todas las estatuas con caras de dolor, de sufrimiento. Los Clavos de Cristo pintados exagerados, como si la sangre escurriera.

Mi abuelo sonreía. Sabía que era un sufrir para mi escuchar ese tipo de música, y mas estando rodeada de figuras de santos con semblantes dolorosos. No solo eso, la luz parpadeaba porque la lluvia afectaba la corriente eléctrica.

Veía el techo del Santuario. Los ‘plafones’ del techo estaban manchados indicando que pronto comenzarían las goteras en la iglesia. El olor a tierra mojada estaba llegando a todos.

La misa terminaba, el coro se había callado y yo volvía a ser feliz de la mano de mi abuelo Memo. Sabía que muy pronto me compraría un raspado de limón antes de llevarme a casa. Fuí la primer nieta y eso me hacía tener una relación muy especial con el.

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Qué curioso como puede uno recordar una vivencia con tan solo oler ó escuchar algo. Este domingo que pasó estábamos en misa y el coro comenzó a cantar esa misma canción. “Vino y Pan, en Oblación”.

Aqui en El Paso vine a escuchar esa canción que tenía mas de 30 años sin volver a oír. Me causó el mismo sentimiento. Me dieron ganas de llorar y me sigue dando miedo la canción. ¿Cómo ven?

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Me transporté a ese tiempo. Y al mismo tiempo me puse un poco melancólica.

Tenía ya toda la semana recordando a mi papá y como van a ser ya 18 años que celebro el Día del Padre sin el.

Y ahora esta canción me hizo recordar a mi abuelo, mi segundo papá. Lo adoraba porque no les puedo explicar la clase de ser humano que era. Los que lo conocieron no pueden mentir que fue un hombre ejemplar y con un corazón que no le cabía en su pecho.

Mi abuelo murió 3 meses despues que mi papi. Todos estos años tambien sin poderlo abrazar en su día. No puse atención en la misa por estar pensando en mi abuelo. Y me hizo tanto bien!

Me encantó tener puros recuerdos lindos de el en mi corazón. En la foto anterior pueden ver a mi abuelo con un VODKA TONIC (ahora entiendo de donde saco yo el gusto por esa bebida!)

Fuí y seré siempre su Ginita.

El último consejo que me dió en 1995, antes de morir, fue “Ginita, trata de conocer y casarte con Erubiel Durazo. Es buen muchacho”.  Mi abuelo fue fan del Baseball desde siempre!! 🙂

Al final decidí no estar triste (aunque este 2013 es el año que más he necesitado a mi papá y a mi abuelo, por miles de razones, principalmente por sentir la necesidad de estar respaldada y apoyada. De escuchar un buen consejo de un hombre que me quiere por ser como soy. Y por la necesidad de un abrazo que me haga sentir protegida).

Al final decidí dejar el pasado y ponerme a festejar a los padres presentes en mi vida.

Y así fue como pasamos el día en casa del primo Toño Andreu, en Cd. Juarez.

Se reunió toda la familia, incluyendo a Juan mi cuñado y su familia recien llegada de Washington. Vinieron a pasar unos días.

El convivio estuvo muy agusto, alberca, discada (una combinación de carnes de res, puerco, tocino, jamón, winis, chile tomate cebolla y la salsa secreta del experto Martin Andreu), cheves super frías y mi pastel 4 leches que fue un éxito..

Los primos platicaban de la campaña electoral de Toño. Se respira esperanza y muchas ganas de trabajar y hacer algo por Juaritos, que ha estado tan golpeado en los últimos años.

Me emocionó ver unida a la familia. Sinceramente siempre les he reconocido a los Andreu Rodriguez que tienen una manera de convivir en las buenas y en las malas y son un ejemplo de unidad familiar. Los quiero mucho, son mas que mi familia política!

Espero que todos los papás hayan tenido un lindo día, los hayan festejado y consentido mucho. Trabajan mucho y son parte importante de la familia.

Felicidades otra vez!!

Y no se les olvide que “no hay mejor papá que el que trata bien a la mamá de sus hijos“..

NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 🙂