A veces si me gustaría ser un Twinkie.

Pero no la clase de ‘twinkie’ que corrientemente usan para describir a una “jovencita guapa ó BIEN BUENOTA “.

O bueno, tambien estaria padre ser ese tipo de TWINKIE. 😉

Hablo del gran experimento que hizo HOSTESS al desaparecer del mercado debido a una “crisis existencial y económica como empresa”.

No me la creo.

En mi mente no deja de rondar la idea que HOSTESS vió la muy marcada declinación de ventas de sus productos. Personalmente puedo decirles que tenía años sin acordarme de estos postres.

Y no fue hasta hace un año más ó menos que me acordé que existían porque anunciaban la desaparición de los mismos.

Y si me entró la melancolía y el nervio.

¿Qué si se me antoja un twinkie y no hay?

Fui al Albertsons a comprar unas cajas para congelarlas y así tener ‘por si acaso’. Y YA NO HABIA!

La gente, como cuando hay alerta de sismo, huracanes ó fuertes nevadas, había arrasado con todo HOSTESS en todo el pueblo.

Entonces así fue como mágicamente, volvió a mi el antojo de comerme un DING DONG, un SUZY Q, un CUPCAKE… cuando antes prefería mil veces que me engordara un Hershey de almendras a un TWINKIE.

El sólo hecho de no poderlos comer hicieron que se volvieran irresistibles para mi.

Y cuando no estaban en el mercado, otras compañías la trataron de igualar. Little Debbie, Bimbo, Marinela por mencionar a algunas sacaban los pastelillos parecidos. Pero, nada que ver!

El mundo suspiraba la ausencia de Hostess.

Muchos al igual que yo, lo hacían solo por saber que no podrían comerlos en caso de que se antojaran.

Otras personas si eran adictas a ellos e incluso leí un artículo en Internet que el “HOSTESS DETOX” era algo médicamente serio. Sobre todo psicológicamente, como el dejar de fumar ó cualquier otra adicción.

Me dió tanta risa ver que el mundo ha llegado hasta esto! Necesitar terapia por la ausencia de un DING DONG.

El 16 de noviembre del 2012 fue el último día que se vieron los Twinkies en las tiendas. Desde 1930 hasta el 2012 el mundo se endulzaba con HOSTESS.

Esta semana, pues resulta que VOLVIERON, despues de 8 meses sabáticos.

Y que ahora vuelven menos pesados y con una duración de 45 días sin echarse a perder. O sea, MEJORADOS.

Pero como dice mi amiguita Silvia Maldonado “¿quién puede aguantarse los 45 días sin comerse el twinkie que está en la alacena?”

A mi no me gustó eso de que duren mas. Eso me indica que tienen mas conservadores y químicos que al final en unos años nos dirán que por eso nos da cancer.

Y de verdad, MIS RESPETOS a HOSTESS por haber engañado al mundo y por haber logrado la estrategia mercadotécnica mas inteligente de todos los tiempos.

Las estadísticas muestran que las ventas estan al TOPE.

Las líneas de producción están a su máxima capacidad, surtiendo a miles de ciudades a nivel mundial.

Los que habían sanado la adicción gracias a las terapias volverán a saborear el twinkie.

Y como dice mi amigo Fernando Bonilla, “Move Over Little Debbie, Twinkies are back“.

Y es por eso que a veces quiero ser un TWINKIE.

Muchas veces he querido desaparecer por un rato de muchas cosas. Especialmente de las redes sociales, de este blog, de muchas cosas y escapar.

Y anunciar mi despedida y desaparición.

Y sentir que la gente me va a extrañar si no me hago presente.

Para que el día que vuelva, haya una revolución y todos quieran volver a saber de mi.

A veces si siento que “doy flojera” que me encuentren en todos lados.

Estoy, como dijo HOSTESS, en una “crisis existencial” por estar sobre expuesta a nivel virtual.

Y es cansado.

Todos debemos usar la estrategia de Hostess de vez en cuando para que nos valoren.

Que tus hijos sepan que no estarás y sepan agradecer tus sacrificios de padres.

Que tu marido no de por hecho que siempre que llegue del trabajo allí te va a encontrar.

Que tu jefe valore tu esfuerzo y trabajo y sepa que un día tal vez no quieras ya bailar al son de su tronada de dedos.

Pero yo no soy un TWINKIE.

Para unas cosas y personas si causaría un efecto TWINKIE si desapareciera.

Para otras cosas y personas ni cuenta se darían de mi desaparición.

Lo que si se es que estar siempre disponible te hace menos interesante.

Y solo por eso quisiera ese TWINKIE POWER..

NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 🙂