¿Y tú qué?

No tengo el llamado ‘writer’s block’ este día. Solo que no se que platicarles primero. He escrito tanto los últimos días que confundo que les dije y que no.

Me gusta tanto escribir y lo hago tan seguido que siento que mis dedos hablan por mí. Lo que mis dedos no pueden hacer es ponerle el tono a mi texto.

Si, claro. Puedo escribir de algo que les cause mucha risa mientras estoy llorando por algo que me pasa en la realidad.

Puedo también hacerlos llorar con una historia mientras yo estoy feliz de la vida, sin penas.

Mis dedos no describen lo que hay en mi mente ni en mi corazón. Les da una idea, pero no expresan realmente lo que pienso.

Pasa seguido con el mundo el día de hoy. Si por algo falta un signo de puntuación, todo el texto cambia de sentido y el receptor no capta lo que el emisor quiere comunicar.

Por eso hoy no quiero escribirles nada. No tengo muchas ganas de pensar ni de estructurar las letras para que formen palabras que los anime esta semana.

No tengo ganas de escribirles. Hoy es un día que quisiera que me escribieran a mi para ver que se siente leer sus pensamientos, aunque sea el día de hoy.

¿Cómo te sientes?

¿Cómo van sus planes?

Platícame como están en tu casa.

¿Has visto una serie nueva en la tele?

¿Qué te da miedo del gobierno?

¿A dónde vas a ir de vacaciones en el verano?

¿Qué te falta?

Si quieres escribirme, hazlo.

Yo se lo que se siente que nadie te pregunte realmente como estás. Todos estamos muy ocupados con nuestras propias situaciones que no hemos tenido la educación de parar y preguntar a los que nos rodean ¿cómo estás?

A veces los textos no son suficientes. A veces alguien necesita una voz o una mirada de frente.

La vida es muy difícil para todos como para que nadie tenga el detalle de pensar en los demás.

Así que dime como estas realmente.

Yo se que siempre quiero contestar y opinar de lo que me platican, pero les prometo no decir nada si no me lo piden.

Prometo solo ser receptor, aunque mis dedos se mueran por hablar.

Anda, escribe ahora tu para mí. Tengo ganas de leerlos.

Así que, ¿y tú qué?                  

NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 😊