Me acordé, con el título de este blog, de la película “The Neverending Story”, en la cual el ente maligno que destruía todo se llamaba “The Nothing”, es decir “la Nada”.
La nada.
A veces lo es todo.
Curiosamente pensamos que el “no hacer nada” es algo malo. Es algo que no debe de ser.
Sin embargo, hubo muchos momentos del año pasado en que hubiera preferido que mis amigos mas cercanos no hubieran hecho nada.
Es decir, a veces el no hacer nada por alguien es lo mas especial que puedas hacer.
No hagas, no le digas, no la regañes, no la critiques, no le expliques, no te justifiques para decir que eres el mejor amigo.
Simplemente no hagas nada.
Y me inspiré para este blog en el capítulo de Game of Thrones, que sin decirles lo que pasa para no arruinarles la serie, uno de los personajes (mi favorito la verdad) dice exactamente así:
“Sometimes doing nothing is the hardest thing to do”- Tyrion Lannister.
El dijo “A veces hacer NADA es lo mas difícil de hacer”.
Uno siempre escucha para responder, para componer el problema de la persona que te está confiando para desahogarse.
A veces la persona no quiere una lección de vida. A veces solo quiere que la escuches sin hacer ni decir NADA.
Pero es muy difícil hacer eso. Estamos como que programados para hacer algo, como necesidad fisiológica y psicológica de responder en lugar de ATENDER cuando escuchamos.
Escuchar sin opinar, sin juzgar, sin querer poner tu ‘sazón’, es un arte y una cualidad muy poco común.
Es verdaderamente un don que se tiene el poder oír sin responder.
¿A poco no? Inténtalo verás. A la otra que alguien te quiera decir algo, quédate callado. Obviamente sin hacer gestos de que no te importa, sino quédate en silencio. Quizá un breve contacto físico, un abrazo, tomar las manos. Pero en silencio. (Al menos que te digan, “Que piensas?” Y entonces sí, pero medidamente).
Escuchamos para responder y sentirnos que tenemos la razón.
Yo he perdido a amigos cercanos. Quizá los mas cercanos que he tenido porque no supieron ofrecerme nada. Con que estuvieran siempre hubiera sido mucho mejor que todo.
Nada es una palabra tan fuerte y últimamente tengo mucho de nada.
No se a que se deba.
Quizá es que después de meses de andar “en friega” con tomas de decisiones, decisiones de vida propia y de mi familia, ahorita he llegado a un estado de nada.
Los meses que han pasado han estado super emocionales, emocionantes y como una montaña rusa.
Cambió mi vida totalmente. (Aunque fue un proceso y muy en paz, en buenísimos términos, el cambio fue totalmente radical).
Tomar decisiones que cambian la vida de tu familia fueron mi responsabilidad.
Empacar y mudanza y pensar y presupuestar todo.
Despedirme de las personas mas especiales de El Paso y tambien despedirme temporalmente de los mejores ribeyes del mundo entero
Encontrar escuelas
Rentar casa
Renunciar “temporalmente” a mi trabajo para ver que voy a hacer en San Diego. Dejé mi carrera en quizá el momento mas importante de la compañía en la que las oportunidades venían todas dirigidas hacia mi y mis compañeros.
Aventarme ese clavado valiente de irme a vivir a una ciudad grande y “cara” (Si me alcanza! jajajajaja!)
Cambiarme
Arreglar la casa
Ver como andan mis hijos, tanto emocional como sentimentalmente con todo esto.
Seguir las vacaciones
Estar feliz con la visita
Comenzar a entender que vivo aquí y no son vacaciones de verano
Empezar la rutina de madrugar, empacar loncheras, llevar y traer niños.
Y la lista sigue…
Yo no soy buena para los cambios y sin embargo todo cambié en unos meses. Absolutamente todo.
Les confieso que entré en un tipo de limbo.
Así como un switch, pum! dejé de pensar.
Estaba en la nada.
Sí, claro, con mis hijos haciendo mi mayor esfuerzo de que todo estuviera bien. Me los he llevado a conocer todo San Diego, lugares hermosos que ni sabía que existían, y sinceramente estamos muy feliz! Todos los días lo comentamos “qué bonito donde vivimos”. 🙂 ❤
Pero en lo personal me entró una tipo depresión (sin llegar a ser una tristeza) en las que iba a dejar a mis hijos a las 7am y de 7:15am a 2:15pm me la pasé en mi casa, sin salir, en piyamas, haciendo NADA.
Tal vez si acomodando y limpiando mi nuevo depa. Tal vez con la laptop en mi panza viendo redes sociales ó series de Netflix.
No me bañaba hasta las 12 antes de comenzar a hacer la comida. O sea, muy mal. jajaja!!
Es decir, no es que no hiciera NADA pero los que me conocen saben que yo no paro. Estoy acostumbrada a trabajar, ser mamá, chofer, cocinera, salidora social, etc.
Sigo esperando la fecha de mi examen para poder ser agente de bienes raíces en California. Ya tengo la de Texas y Nuevo Mexico pero tengo que volver a hacer el examen para California. En cuanto la tenga yo se que se abren todas las posibilidades de muchas cosas.
No se si trabajar en otra cosa aparte. Creo que las cosas se irán acomodando.
Le estoy ayudando a mi hermana con unos proyectos y creo que vamos bien.
Pero al final estoy en un breve receso que tal vez me merecía y de verdad necesitaba.
No me malinterpreten, he disfrutado mucho el no hacer NADA.
Pero yo soy una persona muy inquieta y me estoy desesperando ahora sí.
Esta es la primer semana en la que ya regresé al gimnasio y sigo buscando más cosas que hacer, aparte de seguir estudiando.
Estoy por primera vez en mucho tiempo tomando las riendas de lo que quiero ser!
Sigo haciendo “nada” pero con un poco más de planes a corto plazo.
Le debo una disculpa a todas las sandieguinas que no he visto por andar en la NADA. SusyQ, ChachaE, ClaudiaM, LetyR, etc.
Ya voy a agarrar la rutina, se los prometo.
Quiero agradecer a Dios porque he podido tomarme este tiempo de NADA, para aterrizar, acomodarme, ver como estoy sin nada ni nadie que me lo diga. Porque puedo darme ese “lujo” de no hacer NADA un tiempo.
Eso tambien es muy importante. Estar sola contigo mismo es la mejor manera de saber la verdad sobre tí. No cómo te ven los demás sino cómo te ves cuando estas contigo misma.
Muy feliz. Creo que así estoy ó al menos para allá voy!
Pero ya saliendo de la Poderosa NADA, que me puedo acostumbrar muy fácil.
(De todos modos practicaré la dulce experiencia de no hacer NADA de vez en cuando).
NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 🙂
gina dewar 