Hace algunos días, desperté con la firme intención de provocar sonrisas a las personas que quiero mucho. Y ese fue mi status en FACEBOOK:
¿Porqué?
La verdad no se. Amanecí así, con la necesidad de mandar sonrisas a mucha gente. Al principio, solo le ponía un 🙂 a mis amistades y contactos que le daban un LIKE al status.
Pero despues dije “Mejor le mando caritas felices a Fulano y Mengano.”
Y posteriormente pensé “Hijole, si le mando a Fulano y Mengano, pues entonces tambien debo mandarle a Perengano y Zutano”.
Así comenzó este experimento.
Al principio fue fácil, me metía al muro de cada uno y les iba dejando un 🙂
Hacerlo de mi teléfono fue mas fácil, ya que me brinda una lista sin algun orden en particular.
De volada todo el mundo preguntando que pasaba.
“¿Y esas caritas que?”
“¿Te hackearon tu cuenta?”
“¿Y esa mamada?” (perdón por la palabra pero asi me preguntaban)
Aprendí mucho este día.
Me pude dar cuenta que muchos contactos tienes un accesso limitado en su muro que no permite que uno ‘postee’ algo, es decir, no deja escribir mensajes en su muro. A muchos les quería poner la carita feliz y el sistema no me dejó!
Aprendí que tengo muchos contactos de los cuales dudaba si debían estar en mi lista de Facebook. Pero al irme metiendo a sus muros me di cuenta que si deben estar allí porque de alguna manera han estado en mi vida.
Aprendí que hay mucha gente que quise tanto en un momento de mi vida pero que el tiempo y la distancia los ha ido alejando. El entrar a sus muros me permitió recordar muchas cosas y poner el ‘happy face’ fue un orgullo.
Aprendí que se sacaron de onda muchas personas, no entendiendo porque lo hacía.
Aprendí que en un ratito se pueden saturar mis ‘inboxes’ con mensajes privados de “¿Pos que traes tu?”
Aprendí a reirme de la pena porque algunos pensaron que la carita feliz era un coqueteo.. Sorry pero no. No es mi estilo, jajajajaja!
Disfruté cada mensaje de agradecimiento por haberles mandado algo tan simple como eso.
Disfruté que me dijeran que “les hice el día”, “necesitaba una sonrisa”.
Me pude dar cuenta que soy una irresponsable al estar mandando happy faces mientras manejaba a madre por el freeway, de punta a punta. Mensamente decidí hacer esto en uno de los días mas llenos de trabajo, eventos, compromisos, etc.
Aprendí a tragarme el dolor de unas palabras negativas que me dijeron por haber hecho este experimento. Me sorprendí escuchar de una persona importante en mi vida “¿Te das cuenta que te ves osciosa haciendo eso?”. 😦 No lo supero, pero tampoco soy rencorosa.
Me estresé mucho porque no se que le moví a mi teléfono y la lista de contactos se revolvió toda, haciendo que a muchos no les llegaran mis caritas felices. Si me lees ahorita y no te llegó, no fue porque no quise, fue porque realmente perdí el control de lo que estaba haciendo.
Cocinar y mandar caritas felices puede ser una tarea difícil.
Me llené de buenas vibras de una manera increíble! Es muy dificil de explicarles, pero literalmente sentía que a todo el que le dió gusto que les llegaran las caritas me mandaron buenos pensamientos, bendiciones y sonrisas.
Me dió mucha pena con todos mis amigos que tienen bastantes contactos en comun conmigo, que sus muros se les vieran saturados de mi actividad loca de mandar sonrisas. Laura T y Silvia M, mis etapas, SORRY.. jejejeje. Me hubieran bloqueado ese día!
Recibir tantas ‘gracias’ por un gesto tan sin chiste me hizo sentir tan especial ese día.
Y luego no se que pasaba, pero a algunas personas le llegó doble carita… Que pena! Han de haber pensado que era una enfadosa!
Mas de 1200 caritas fueron enviadas… y me faltaron unas 200 mas pero ya no supe como hacerle.
Hubo un momento que mi telefono se bloqueó y Facebook me hizo escribir mi contraseña varias veces, escribiendo tambien unas letras encriptadas que me mandaron, solo para comprobar que yo no era un robot, un hacker ó un virus. (Háganme el favor).
Esa noche terminé en EL CAFE de mis amigas, provocando sonrisas en vida real mientras nos terminamos unas botellas de vino tinto chileno.
Este experimento me enseñó a conocer como piensan muchos de mi. Los que me ven como ‘ridícula’, ‘que hueva me das’, ‘que loca’, ‘que cool’, ‘que padre!’, ‘que rarita’, ‘que padre ser tu amiga’, ‘nunca me borres de tu Face’, ‘solo a ti se te ocurre’, etc. 😉
Me encantó lo que me dijo Analidia Morales “Una sonrisa se multiplica”… 🙂 De verdad lo pude sentir.
Y tambien me pude dar cuenta que un gesto tan fácil, tan GRATIS que es, como el mandar un saludo, una carita feliz de ven en cuando a alguien que hace mucho que no ves, no le hablas, no sabes nada de su vida, hace MARAVILLAS.
Cumplí con mi objetivo de ese día. Fuí la culpable de provocar sonrisas de una manera simple.
Creo que la gran mayoría estamos unidos no solo por las redes sociales, sino porque no está tocando vivir una época diferente.
Tenemos a nuestro alcance tanta tecnología que a veces usamos de ‘terapia’. Y los que nos leen nos pueden realmente sentir.
Todos pasamos momentos difíciles, depresivos, angustiosos. Es una maravilla poder hacer sentir bien a alguien con solo mandarle una carita feliz.
Para muchos fue algo X, para otros fue algo original y hubo algunos que esa carita fue lo único positivo que les pasó ese día.
No me mal interpreten. No lo hice por llevarme aplausos, lo hice porque verdaderamente ese día en particular así amanecí. Con todas las ganas de sonreir y que todos los que estuvieran cerca de mi física y virtualmente tuvieran tambien una sonrisa.
*Y quiero decirles que por muchas razones, todo este día estuve pensando en mi amiga Cristy Burgos, la verdadera dueña de los SMILEY FACES, despues de FORREST GUMP.
NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 🙂