Las redes sociales han estado invadidas con fotos de todos de hace 10 años junto con una reciente, dando así al #10yearchallenge.
En las fotos se aprecia como eramos y como estamos.
Se siente muy padre ver las fotos que subíamos al Facebook en 2009 y ver que estamos mejor en el 2019.
Si, entiendo.
Hace 10 años no teníamos las cámaras de hoy en día, que no toman la foto si no sales bien, sonriente, con luz, sin bizcos.
Hace 10 años no había filtros y las cámaras no venían con estos lentes tan sofisticados.
Hoy subimos fotos y ajustamos la luz, le damos luz a nuestra cara, usamos los tonos que nos hagan favor, tomamos la foto ‘de arriba’ para vernos delgados (y cabezones) y sobre todo nos tomamos muchas hasta que nos gusta una (ó si la foto es de un grupo hasta que todos estamos contentos y seguros de que el que la suba a la red social la va a recortar para que no salga la lonja y va a etiquetar a todos).
Si, es cierto, hay un antes y un despues de los filtros.
Los filtros antes eran un papel delgado para colar el café, unas mallas especiales para purificar el aire, el material especial donde va la boca en el cigarro para no dejar pasar tantas toxinas al dar el toque, etc.
Hoy los filtros son efectos especiales en los teléfonos que nos hacen ver muy guapos, mejorados y casi con piel y semblante perfecto.
Si, todos todos usamos filtros, ajustamos la foto, la “arreglamos”.
No me había dado cuenta de que usamos muchos filtros hasta que me puse a pensar que todos me dicen “Wow, eres muy fotogénica”.
(O sea en persona ladras, wuf!)
Bueno, al menos eso siento cuando me dicen.
Le bajé al filtro, pero pues los mismos teléfonos ya traen lente especial para que no salgamos tan gachos en las fotos, así que ni modo, siempre seré mas fotogénica que atractiva en la vida real.
Ahora con este #10yearchallenge, no faltaron los que publicaron que obviamente estabamos mejor hoy que hace 10 años debido a los filtros y cámaras modernas. Si, ya sabemos posar en un mundo donde reinan los selfies… Ya nos podemos quitar lo rojo de los ojos, blanquear la sonrisa, adelgazar y borrar lineas de expresión con un solo botón.
Estoy de acuerdo, si es cierto. No es que estemos mejor que hace 10 años. Nos hemos hecho mejores para el fotoshop.
No iba a escribir de esto este día (porque hoy es mi 8vo aniversario en este blog y quería escribir de eso), pero la moda y los comentarios tanto positivos como negativos del #10yearchallenge me dieron esta idea.
Si, físicamente no estoy mejor que hace 10 años, pero mentalmente y emocionalmente si lo estoy.
Para eso no hay filtros ni fotoshop.
Yo no soy la misma que hace 10 años. Ni siquiera me parezco a la que era en el 2009.
En estos 10 años he vivido muchas cosas que me han pulido, dado luz, embellecido mi personalidad porque me han hecho fuerte y con decisión.
Hace 10 años era miedosa e insegura de muchas cosas.
No me gustaba quedar mal con nadie y sacrificaba muchas cosas para evitar conflictos.
Yo ya no uso filtros para pensar ni para actuar.
Hace 10 años se me escapaban oportunidades por pensarla mucho.
Si, es cierto, ya no tengo 36 años, pero creo que por fin entendí que la felicidad está en mi y en nadie más.
Me tardé mucho en entenderlo.
En estos 10 años tambien he aprendido que si a alguien no le gusta lo que haces no es problema tuyo. Aprendí que si eres tu mismo y no le gustas a los demás pues es problema de ellos y no tuyo. (Si no te gusto, tu te la pierdes).
Hoy no me espero para actuar.
Hace 10 años tenían que llevarme de la mano para que yo hiciera las cosas.
He aprendido de muchas maneras a ser independiente.
No era mi plan estar sola hace 20 años. No sabía como estarlo hace 10. Hoy ya tengo una mejor visión de qué hacer y cómo hacerlo.
Yo ya no tengo fotoshop en lo que digo, ni lo que pienso, ni lo que quiero.
Lo que quiero ya lo pido. A veces lo consigo, otras no. Pero callada ya no me quedo.
Lo que digo a veces agrada y a veces no gusta nadita (pero tambien he visto como se aleja gente y se queda la que vale la pena).
No tengo fotoshop de lo que quiero. Sé exactamente que es lo que necesito.
NO hay filtros en mis sentimientos. Los digo así como van. Si los aceptan, que bien. Si no, tambien.
No me gusta agredir a personas y por eso mejor me callo pero últimamente si les digo “te pasas” a los que la andan regando con sus opiniones lastimando gente inocente.
Hace 10 años no necesitaba filtros en las fotos, pero vivía llena de filtros y ‘tabús’ impuestos por una sociedad que me dominaba porque ‘así tenía que ser”.
Hoy si tengo más arrugas, mis ojos ya no brillan tanto, mi cabello está frágil, me cuesta mucho mantener mi peso y salgo mejor en las fotos gracias a los filtros de Instagram.
Hoy ya no soy la de hace 10 años en mi manera de pensar, ser y actuar… y creo que soy la mejor versión de mi persona, así mero… SIN FILTROS.
NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES:
Yo siempre te he visto hermosa amiga 😍 Y ahora que eres libre emocionalmente y estás mas tranquila te ves mas hermosa todavía 😘😘
love you friend.