La semana pasada me fui a hacer manicure y pedicure para irme muy ‘nice’ a Mexicali 🙂 .

Fuí de volada con los chinitos porque allí no tengo que poner citas, siempre hay mil chinitos que me pueden atender y entro y salgo de volada.

Escogí un color morado para mis manos y uno verde fluorescente para los pies. Cero elegante y cero simple. Al contrario, bien llamativos los dos colores.

Estaba a medio manicure cuando oigo que una señora me dice: “Chula”.

Yo no hacía caso porque la verdad jamas pensé que me hablaba a mi.

Y otra vez la señora, “Hey tu, Chula”.

Pues ahora si voltié y le pregunté, “¿me habla a mi?”

Con la cara me dijo que SI.

Tenía las manos metidas en una solución para suavizar las uñas postizas que tenia para arreglárselas.

“¿Sabes algo ‘mija’? Me estoy arreglando las uñas porque mañana comienzo un tratamiento muy fuerte de quimioterapia”. La señora no dejaba de verme fijamente a los ojos.

Yo creo que me quedé con la cara estática sin parpadear.

Ahora si que ‘me quedé sin habla” y eso es muy difícil que me pase.

“¿Dónde tiene cáncer?”, le pregunté.

NO se porque le pregunté eso. De todo lo que le pude haber dicho, eso fue lo primero que me salió decirle.

“Al principio fue cáncer en el pecho y estaba ya controlada. Por eso traigo el cabello tan corto, apenas me creció de las quimios anteriores”. Me platicaba la señora como si fuera su amiga de toda la vida.

Yo nomás me le quedaba viendo, escuchándola.

“Hace unas semanas me volví a sentir mal y parece que el cáncer está ya invadiendo todo mi cuerpo”.

Pude ver como su cara se le puso un poco triste y pensativa. Y volteó a ver a la chinita que estaba limándole ya las uñas.

Yo me sentía muy rara, como incómoda. Sobre todo, no sabía que decir ni como actuar.

“¿Tiene miedo?”, le pregunté, otra vez hablando sin pensar.

“¿Miedo Chula? No. Hace mucho que no me da miedo morirme. Lo que me da miedo es no aprovechar la vida, por eso estoy aquí. Además, el miedo es ausencia de fe en la vida y en lo Supremo”, me decía con una sonrisa.

Para esto las chinitas que nos estaban entiendiendo todo hablaban en mandarín entre ellas. Estoy segura que estaban hablando de la señora y su plática, o tal vez de mis manos descuidadas.

“¿Tiene quien la lleve a las quimios?”, le pregunté, una vez mas sin pensar lo que decía.

No sé, a veces pienso que conozco gente de manera casual porque tengo algo que hacer por ellos. (Tengo complejo de hermana de la caridad ó algo asi).

“Si, Chula. Mi hijo me va a llevar. Tambien mi nuera. No estoy sola”, me seguía sonriendo.

“Ah, muy bien! Me da gusto. No se preocupe, todo va a estar bien!”, le decía ya con la preocupación.

“¿Sabes que? Me iba a pintar las uñas un color rosita neutral, pero me las voy a pintar como tu, así igualitas, llenas de color y de vida”, me decía riéndose.

“Jajajaja, ok! Me da gusto!”, le decía con cierto orgullo que mis colores vivos la animaran.

“Oye chula, yo no se que pase en tu vida, ni te conozco ni se quien eres pero quiero darte un consejo muy importante. DISFRUTA EL DIA, cada 24 horas de tu día. No te lamentes por lo que ya pasó ni te preocupes por lo que viene.”.

No se porque conocí a esta señora, ni porque se puso a platicarme su padecer. Pero en el fondo siento que Dios me la mandó para aterrizarme de que las cosas no estan tan mal en mi vida.

Tengo salud, mis hijos tienen salud. Se abre un panorama lleno de posibilidades y lo único que debe preocuparme es que se me cumplan tantos planes lindos que tengo!

VIVIR EL DIA, no hay nada mas cierto!

Toda la vida uno desesperado por que se lleguen las fechas, los veranos, los viernes, los dias festivos y se nos olvida disfrutar cada dia.

Asi que tenemos que gozar de poder madrugar, tomar café, ir a trabajar, poder ir al gym, las comidas mas simples, un buen vino, los atardeceres y amaneceres, la naturaleza, un buen chat con los amigos, un buen libro, un par de piyamas cómodas, etc.

Disfrutar al máximo, así como la señora que fue a poner sus manos y pies bellos para llegar feliz a un tratamiento fuerte que determinará si se salva ó no.

Me enseñó una desconocida en una hora que la vida propia se debe amar a cada segundo.

No es que no lo haga, pero se me olvida.

Me distraigo con tonterías y cuando menos pienso ya pasó mucho tiempo y no quiero desperdiciar mas días.

Mejor disfruto cada momento lo mejor que pueda y cuando me sienta llena de stress me voy a acordar de la señora en la quimio con uñas moradas y verdes fluorescentes por mi culpa! 🙂

SALUDOS DESDE MEXICALI BC.

NOS VEMOS EL PROXIMO MIERCOLES 🙂